viernes, 13 de marzo de 2009

Me acordé de como te gustaba cuando te abrazaba por la espalda. El cuerpo juntito al mío. Y, abriendo un sendero entre los pelos, el beso en la nuca. Ninguna prisa. La mano en el seno en el seno en el seno. Los ojos cerrados para sentir mejor la presión del cuerpo, el beso en la nuca. Y el beso en la boca. Mojado. El toque en la lengua. La lengua en la lengua, saboreando. La lengua en el diente. El diente en el labio. El sabor a sangre del beso.