jueves, 24 de julio de 2008
sábado, 12 de julio de 2008
construção
Amó aquella vez como si fuese la última,
besó a su mujer como si fuese la última,
y a cada hijo suyo como si fuese el único,
y atravesó la calle con su paso tímido.
Subió a la construcción como si fuese máquina,
alzó en el balcón cuatro paredes sólidas,
ladrillo con ladrillo en un diseño mágico,
sus ojos embotados de cemento y lágrimas.
Sentóse a descansar como si fuese sábado,
comió frijoles y arroz como si fuese un príncipe,
bebió y sollozó como si fuese un náufrago,
danzó y se rió como si oyese música
y tropezó en el cielo como si fuese un borracho.
Y flotó por el aire como si fuese un pájaro,
y terminó en el suelo como un bulto fláccido,
y agonizó en el medio del paseo público.
Murió a contramano entorpeciendo el tránsito.
Amó aquella vez como si fuese el último,
besó a su mujer como si fuese la única,
y a cada hijo suyo como si fuese el pródigo,
y atravesó la calle con su paso borracho.
Subió a la construcción como si fuese sólida,
alzó en el balcón cuatro paredes mágicas,
ladrillo con ladrillo en un diseño lógico,
sus ojos embotados de cemento y tránsito.
Sentóse a descansar como si fuese un príncipe,
comió frijoles y arroz como si fuese el máximo,
bebió y sollozó como si fuese máquina,
danzó y se rió como si fuese el próximo
y tropezó en el cielo como si oyese música.
Y flotó por el aire como si fuese sábado,
y terminó en el suelo como un bulto tímido,
agonizó en el medio del paseo náufrago.
Murió a contramano entorpeciendo el público.
Amó aquella vez como si fuese máquina,
besó a su mujer como si fuese lógico,
alzó en el balcón cuatro paredes fláccidas,
Sentóse a descansar como si fuese un pájaro,
Y flotó en el aire como si fuese un príncipe,
Y terminó en el suelo como un bulto borracho.
Murió a contramano entorpeciendo el sábado.
Por ese pan para comer, por ese suelo para dormir,
Registro para nacer, permiso pa' sonreír,
Por dejarme respirar, por dejarme existir,
Dios le pague.
Por la cachaza, gratis, que tenemos que beber,
Por ese humo, desgracia, que tenemos que toser,
Por los andamios, colgantes, de los que tenemos que caer
Dios le pague.
Por la mujer carpintera a nos loar y escupir,
Por las moscas cojoneras a nos besar y cubrir,
Y por la calma postrera que al fin nos va a redimir
Dios le pague.
--
El hombre también hizo una versión en español, que es casi ipsis literis lo de arriba, pero que - al menos yo en mi purismo lo veo así - pierde mucho.
martes, 8 de julio de 2008
nota - a modo de excusa
Por si quedaban dudas, he de decir que el parón de actividades del blog no se debe ni a que me hayan retenido indefinidamente en un 'Centro de Internación' de extranjeros, ni que mis jefes se pasen por el forro las 65 horas (cosa que, curiosamente, hacen) y hayan decidido por una esclavitud de tipo clásico.
Es pura pereza veraniega.
Es pura pereza veraniega.
jueves, 3 de julio de 2008
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